Para Fotógrafos Modernukis

Siempre recibo con alegría el cambio al horario de verano. Además de beneficiar mis hábitos de vida diaria percibo el cambio porque realizo más fotos, especialmente las fotos casuales hechas con el móvil o la compacta. Y es que ese mayor número de horas de sol después de la salida del trabajo se traduce en mayores oportunidades de foto, sobre todo porque especialmente los móviles no se llevan muy bien con la noche.

Quizás influenciado por leer constantemente en estas ultimas semanas sobre la compra de Instagram por parte de Facebook he hecho algunas fotos más que de costumbre usando filtros para dar esa sensación retro/vintage que no suelo emplear casi nunca.

Siempre con Camera +, aplicación del iPhone de la que ya he hablado por aquí, pues Instagram nunca me sedujo. De hecho, al escribir esto he ido a revisar mi cuenta y he comprobado que solo tengo colgadas ocho fotos y sin embargo tengo trece seguidores, lo cual me deja perplejo porque no tengo ahí precisamente cosas como para ser seguido.

Lo cierto es que en mi viaje a Venecia de este invierno le encontré el gustillo a los filtros de Camera + quizás porque la estética de Venecia lo admite por ser un lugar donde todo parece estar situado unas décadas atrás. Y es que un filtro de estas características queda mejor en una góndola atracada en un muelle de Venecia que en la foto de una calle con un Smart aparcado delante de un McDonalds... por poner un ejemplo.

El peligro de estas aplicaciones es encontrarle el gusto a reciclar fotos que en principio desecharías pero que una vez pasadas por su tamiz, no las convierte en buenas pero no te da vergüenza enseñarlas. Me refiero a esto:

Después de cocinarla en Camera +

Otro ejemplo: se trata del detalle de una de las puertas de acceso a la Casa Pilatos en Sevilla.

Un poco de procesado, et voilà.

 

Un último ejemplo: foto anodina que ni siquiera merece la pena para rellenar un mal álbum de Facebook.

Ahora por lo menos, sigue siendo mala pero se enseña de otra manera...
Y con otros condimentos.

Bueno, y ahora, como diría nuestro Rey... no volverá a ocurrir. En la próxima entrada prometo poner fotos hechas con una cámara de verdad.

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