Refugios Lejanos
Dos días en Londres. La excusa: ver a Tony Bennett en el Royal Albert Hall . Una excusa excelente. Pero la realidad es que Londres es una ciudad en la que nos encontramos particularmente bien y para la que no necesitamos excusa alguna. Quizás por conocerla ya bastante bien, uno se ve librado de la presión de no visitar todo lo que las guías dicen que debes ver. Podemos pasear a nuestro ritmo, sin la imposición de cumplir tiempos y objetivos. Incluso permitirnos el lujo de perder el tiempo en un desayuno más largo de lo que estipula el sentido común. Esta ciudad es el refugio que me permite desconectar de todo lo que perturbe mi tranquilidad.